Descanso... [Privado]

por **Miuo Akiyama** Lun Jul 26, 2010 3:42 am

Una suave ráfaga de viento desordenó mis negros cabellos, justo cuando sentía que una hoja se posaba sobre ellos. Apreté un poco más las manos contra la verja, mientras observaba a varios alumnos almorzar, pasear, hablar...

Posiblemente, en ese momento, en el salón de mi clase, hubiera un gran escándalo de gente almorzando, hablando de esto y lo otro y muy poca tranquilidad. Por eso era por lo que había decidido variar un poco. Puede parecer un cliché de los shojos, pero a veces si quieres encontrar tranquilidad tienes que ir a la gran azotea que suele usar el club de Astronomía.

Bueno, como me esperaba aquello estaba vacío. Así que, sin más, fui con mi bento, preparado por mi mismo, y me senté en el suelo, al lado de la verja, desde donde se veía el gran jardín de la escuela.

Tardé bastante tiempo, o eso me pareció, en abrir el bento. Sonreí casi sin darme cuenta, puedo llegar a ser bastante... niño, como si no hubiera madurado. O esa fue la impresión que me dí a mi mismo al encontrarme los onigiris bien preparados, con sus pulpitos con forma... El típico almuerzo de un niño pequeño...

Bueno, eso me hizo pensar en el año anterior, cuando aún no me había mudado... en la Secundaria... en Primaria... incluso en el jardín de infancia. Siempre había sido igual, ¿llegaré a madurar algún día?

Con mis palillos, y aún perdido en mis pensamientos, comencé a comer los lindos pulpos, dando pequeños mordiscos, pensando en el año que llevaba allí...

Bueno, un merecido descanso.

por **Taki Imoo.** Miér Jul 28, 2010 12:31 am

¿Y que de malo tenía ir a almorzar a la azotea? No, no tenía nada de malo. Es por eso que el pelinegro ahora mismo iba a allí, subiendo las escaleras a dos escalones o más, con su 'almuerzo' en el bolso con el cual no podía vivir.

Bueno, ver a todos en su Salón hablando y no poder integrarse fácilmente le era frustrante. Siempre le había sido difícil hacer amigos... o mejor dicho, entablar conversación. Por eso ahora iba camino allí, a la azotea, para estar solo y no ver a nadie conversando sabiendo que el no tendría las agallas para hablarle.

Abrió la puerta de las escaleras y se vio allí, en el lugar más alto de la Escuela. Dando unos pasos a cualquier lugar, se vio pronto cerca de la reja. Vio la vista que tenía el lugar. Una palabra se le vino a la mente casi inmediatamente, 'Hermoso'. Nunca antes había visto algo así. Sin darse cuenta empezó a caminar a todo el largo de la reja, con una mano en ella.

Pronto vio aquel Jardín de la Escuela, la vista era espectacular. Al parecer, embobado por el paisaje, no se había dado cuenta que en la azotea había alguien más que el. Se percató luego de un rato de admirar el paisaje.

Miró a otro pelinegro, le pareció familiar. ¿Lo había visto antes? ¡Sí, lo había visto antes por lo que recordaba! Era el Presidente de su Club... Miuo, Miuo Akiyama.

-¿Vienes aquí a menudo? -Le pregunto de la nada, con una gran sonrisa en sus labios. No pensó encontrarlo allí, le habían dicho que el lugar estaba siempre vacío... bueno, casi siempre, ya que ahora no estaba solo. Se agacho a la altura del otro, para mirarle bien.

...Ahora el de ojos azules no se había embobado por mirar el paisaje, sino, se había quedado embobado mirando a Miuo.

((OFF: Aquí esta el post~ :3 Si no te gusta, dímelo y lo haré nuevamente :DD ...Me gusto tu post x3))

por **Miuo Akiyama** Miér Ago 04, 2010 5:33 pm

El sabor de los pulpos era lo poco en lo que podía concentrarme. Está bien, está bien... Soy un tanto despistado, y aquella ocasión no fue algo distinto. Ni siquiera me percaté de que alguien había entrado...

Fue únicamente cuando escuché una voz a mi lado cuando dejé de comer. Me sorprendí bastante, la verdad, no esperaba que nadie estuviera allí... Sí, me sorprendí y casi me atraganto con el pulpo que estaba comiendo. Tuve que toser un par de veces para que la comida fuera por su sitio, antes de volver a respirar y observar al chico que estaba a mi lado... Seguro que ahora creería que era algo tonto...

Pelo negro, ojos verdes, y además me estaba sonriendo... Le conocía, ¿verdad? ¡Sí, cierto! Él estaba en mi club, y además estaba en la clase 2-2... ¿Cómo era que se llamaba? ¿Taki, cierto?

-Eh... Eh... -Tardé un poco en reaccionar, mirando al otro chico y parpadeando un par de veces... ¡Oh, no! Me había preguntado algo, ¿verdad?- Pues... N-No, solo de vez en cuando... Aunque parezca raro, casi nunca hay gente aquí, así que... puedes relajarte... -Respondí, intentando no hacer ninguna otra cosa que me hiciera parecer... bueno, tonto. Así que simplemente le sonreí, de la misma manera que él me sonreía a mí-. Oh... ¿no será que tú vienes por aquí? ¡A lo mejor querías estar tú solo y tranquilo y te interrumpí! En ese caso, eh... lo siento...

Espera, ¿por qué me estaba poniendo tan nervioso? Normalmente era yo el que tranquilizaba a la gente nerviosa... Desde luego...

por **Taki Imoo.** Sáb Sep 04, 2010 2:47 am

Miró al chico con atención, sin poder de dejar de mirarle ni un segundo. Claro, hasta que al escuchar la voz del otro despertó de aquel tan extraño trance en el cual estaba sumergido, el cual, sin querer, hizo que se le fuera a la mente que Miuo se veía tierno parpadeando varias veces, que se veía adorable.

El de ojos azules escuchó al contrario con toda su atención, preguntándose el por qué del otro tan nervioso. Se sentó en el suelo y apoyándose en la reja, saco su 'almuerzo' (un sandwich de lechuga con carne de pollo y un poco de mayonesa, más una soda).

-Me habían comentado que este lugar siempre estaba vacío... es por eso que vine. Pero no, no quería estar solo completamente, no te preocupes. -Dijo, tranquilo. Eso de estar solo había sido mentira, la verdad, pero no encontró a Miuo como una persona con la cual no hablar. Pronto se le vino a la mente algo, por lo que no dudo en preguntar con tono culpable:- ¿Tu querías estar solo? ¡Lo siento! Tú llegaste primero, así que yo me debería ir a otro lado o algo... -Su sonrisa se achicó, dejando a una sonrisita apenas visible en su lugar. Bajo su vista y cerró sus ojos.

La idea de irse no le agrado mucho. Pero el castaño tenía más derecho que él en estar allí, ya que había llegado mucho más antes que él..., tal vez. No lo sabía con exactitud, pero el sí quería estar solo, se iría.

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((OFF: Perdona por demorar~ uU))

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